El Ministerio de Salud, Desarrollo Social y Deportes recuerda a la población la importancia de la reducción del consumo de sodio para proteger la salud. Es en el marco de la Semana Mundial de Concientización sobre el Consumo de Sal, que se celebra del 29 de febrero al 6 de marzo.

 

La fecha fue instituida en 2005, por la World Action on Salt and Health (WASH), con el objetivo de concientizar a la sociedad en la reducción de su consumo, como aporte para la mejora de la salud de la población.

 

Este año, el lema es “LA SAL OCULTA”.

 

En la actualidad, los niveles de consumo diarios de sal en Argentina, por habitante, duplican la recomendación de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

 

Se estima que los argentinos consumen 11 gramos, mientras que la recomendación de la OMS es de hasta 5 gramos. De acuerdo con datos proyectados por la cartera sanitaria nacional, la disminución de 3 gramos en el consumo diario de sal evitaría 6.000 muertes, 13.000 casos de accidentes cerebro-vasculares y 14.000 infartos al año.

 

Nelson Fredes, responsable  del Programa de Prevención y Tratamiento de Enfermedades Cardiovasculares de la Provincia, destacó: “Es muy difícil llegar a concientizar de forma individual, por eso desde el ministerio y a nivel nacional se está trabajando, a través de una agenda conjunta con la industria alimentaria y la sensibilización de la población sobre la importancia de reducir el consumo”.

 

El cardiólogo agregó: “Mendoza viene trabajando hace cuatro años con el programa nacional  “Menos sal más vida”, con diversas panaderías de la provincia, para promover la reducción de 25% de sal en la elaboración de pan. Actualmente, hay 84 panaderías adheridas a este programa y 32 que ya están certificadas desde Nación.

 

Fredes enumeró algunas medidas básicas para bajar el consumo, entre ellas:

 

  • no agregar sal a las comidas elaboradas
  • no llevar el salero a la mesa
  • leer las etiquetas de los productos y elegir alimentos con menos sodio
  • buscar panaderías adheridas al Programa “Menos sal más vida”.

 

LEGISLACIÓN NACIONAL

 

Argentina tiene una Ley de Regulación del Consumo de Sodio que plantea la reducción progresiva de la sal contenida en los alimentos procesados hasta alcanzar los valores máximos en cada grupo alimentario, fijados por la cartera sanitaria nacional.

 

La norma, además, regula la fijación de advertencias en los envases sobre los riesgos del consumo en exceso de sal, promueve la eliminación de los saleros en las mesas de los locales gastronómicos, fija el tamaño máximo para los envases en los que se venda sal para que no superen los 500 mg y establece sanciones a los infractores.