FECOVITA, una de las cooperativas vitivinícolas más importantes de la región, ha puesto en marcha su campaña de cosecha mecanizada de uva. Este sistema, cada vez más utilizado por los productores, ofrece ventajas en términos de eficiencia y costos.

Juan Garro, representante de FECOVITA, explicó que la cooperativa cuenta con cuatro máquinas cosechadoras autopropulsadas que permiten realizar la vendimia de manera rápida y precisa. «Este sistema es ideal para viñedos con espalderas y permite obtener una uva de alta calidad», señaló Garro.

En cuanto al funcionamiento, Garro explicó que «a través de unos bastones que cuenta la máquina, se hace el desprendimiento de la valla del racimo, para luego pasar por unos despaldeadores, logrando que la valla salga limpia y lista para descargar en el camión».

Si bien, desde algunos años la cooperativa utiliza este mecanismo, nuevos productores han optado recientemente por implementarlo. Para poder utilizar el servicio de cosecha mecanizada, los productores deben cumplir con ciertos requisitos, como tener viñedos con espalderas, una altura de planta adecuada (no más de 190 cm) y un ancho de hilera suficiente para permitir el paso de las máquinas.

La demanda por el servicio de cosecha mecanizada ha aumentado en los últimos años, debido a sus múltiples beneficios. FECOVITA cuenta con una flota de cuatro máquinas distribuidas en los oasis productores de Mendoza, atendiendo a los productores asociados y también está abierta a prestar servicios a terceros.

«Estamos muy satisfechos con los resultados obtenidos hasta el momento», afirmó Garro. «Los rendimientos están siendo buenos y los productores están muy conformes con el servicio».

Beneficios de la cosecha mecanizada:

  • Mayor eficiencia: Las máquinas cosechadoras permiten recolectar una mayor cantidad de uva en menos tiempo.
  • Menor costo: A largo plazo, la cosecha mecanizada puede resultar más económica que la cosecha manual, gracias a la reducción de la mano de obra.
  • Mejor calidad de la uva: Las máquinas cosechadoras permiten recolectar la uva de manera más cuidadosa, evitando daños en los frutos.
  • Exención del impuesto al tacho: Los productores que utilizan la cosecha mecanizada están exentos del pago de este impuesto.