En un nuevo episodio de la disputa entre Mendoza y La Pampa por las aguas del Río Atuel, el gobernador pampeano reclamó de una manera insólita por la falta de agua.

La disputa entre La Pampa y Mendoza por el uso del agua del Río Atuel volvió a encenderse, con La Pampa insistiendo en sus reclamos ante la Corte Suprema de la Nación. Uno de los reclamos más recientes involucra a un histórico emprendimiento bodeguero que dejó de operar hace más de dos décadas.

El gobernador de La Pampa, Sergio Ziliotto, denunció que en San Rafael se está sobrerregando y desviando agua para regar 5000 hectáreas pertenecientes a una bodega. Sin embargo, este proyecto dejó de existir hace años.

«Se están regando tierras improductivas», señaló Ziliotto a Clarín. «Están regando una bodega, en épocas donde no se justifica desde el punto de vista fenológico, le están asignando lo mismo que la Corte fijo para el ingreso de la provincia de La Pampa», apuntó el mandatario.

Ziliotto también explicó que el agua está siendo utilizada en destinos inapropiados. «Como le sobra agua están utilizando a destinos que no son realmente lo que corresponde», agregó el mandatario pampeano.

Lo que los reclamos pampeanos no consideran es que se refieren a la antigua Bodega Arizu en el distrito de Villa Atuel. Esta bodega, que en su tiempo albergaba viñedos en más de 5000 hectáreas, hoy ha reducido significativamente su área cultivada, con muchos viñedos reemplazados por olivos.

El Superintendente de Irrigación de Mendoza, Sergio Marinelli, respondió a estas acusaciones. «Es una empresa que fue bodega hace muchos años, hace más de 20 años, lo que era el paño de viña más grande del mundo, que eran 5000 hectáreas cuando era la Bodega Arizu», explicó Marinelli a un medio porteño.

Marinelli detalló que tras la quiebra de Arizu, el grupo español Pueyo Echevarría adquirió las propiedades y transformó los viñedos en olivares. «De hecho no hay prácticamente viña, han abandonado y arrancado casi toda la viña. Hay una aceitera ahora y riegan unas 1500 hectáreas de olivos, que en esa época donde marca la erogación es cuando la aceituna requiere de una mayor cantidad de agua para que pueda obtener su máximo de productividad», precisó Marinelli sobre la situación actual.

También añadió que, a pesar del riego tecnificado y los reservorios, no ha sido suficiente y han tenido que abandonar parte de los olivares debido a la escasez de agua.

Desde 1996, la familia Pueyo Echevarría, de origen español, se estableció en la zona con un proyecto centrado en la olivicultura, actualmente operado por la firma Villa Atuel SA.