En la tarde del viernes la tragedia se hizo presente en el distrito de Real del Padre. Cristian Facundo Saravia (11) se bañaba por la tarde en un cauce de agua junto a otros amigos frente a la escuela José Mármol.

En plena hora de la siesta, con el termómetro por arriba de las 30 grados, un llamado al 911 alertó que habían perdido de vista al chico, que vivía en la calle Guillén.

Treinta minutos después, cerca de las 15, vecinos de la zona lograron dar con el menor. Con el personal policial presente, comenzaron a realizarle maniobras de reanimación (RCP) y lo trasladaron al hospital local, pero el personal médico de la guardia diagnosticó que había ingresado sin vida.