La adhesión al sistema es voluntaria y permite equilibrar la tarifa durante el año evitando la estacionalidad de consumo.

Los regantes agrícolas de Mendoza cuentan con una nueva herramienta para amortiguar el impacto de la facturación eléctrica durante los meses de mayor consumo, que se registran entre noviembre y febrero.

Es que el Gobierno provincial dictó una resolución que establece, en su Artículo 1°, “un subsidio adicional y complementario destinado a mitigar el impacto de la estacionalidad del ciclo productivo sobre las facturas del servicio”.

El mecanismo es opcional y, mediante la adhesión voluntaria, el regante se beneficia con un sistema que brinda previsibilidad y equilibrio en el abono a lo largo del año.

La denominación de Subsidio por Estacionalidad de Riego Agrícola es el nuevo ítem que aparecerá en la facturación de los usuarios que realizaron el trámite independientemente de la cantidad de hectáreas que posean, es decir que el beneficio está abierto y disponible para todos los regantes.

La determinación del cálculo surgirá de la diferencia entre el importe de la tarifa que efectivamente abona el usuario (consumo real) y el consumo promedio móvil registrado en los últimos seis meses. El valor resultante se sumará o restará de la factura del período actual.

En tanto, los ajustes que se deban realizar, en función de las diferencias entre el consumo promedio y el real del período, se reflejarán en la factura de agosto de cada año.

Si el promedio de los últimos seis meses es menor al consumo del mes actual, el usuario está dentro del período de mayor consumo, pero con el efecto estabilizador disminuirá el monto de la factura actual y viceversa.

La asistencia estará disponible para todos los usuarios que lo soliciten y que no hayan sufrido cortes en el servicio (retiro de medidor) ni hayan experimentado consumos antirreglamentarios y que no tengan deudas pendientes con la distribuidora.

A.C.