El superintendente del Departamento General de Irrigación, Sergio Marinelli, salió al cruce de críticas y de un casi seguro pedido de informes y justificó un polémico viaje a España junto a otras 18 personas. Lo hizo en respuesta a los cuestionamientos que le hizo la oposición.

Según el funcionario, el viaje por Zaragoza, Almería y Madrid, realizado con 11 regantes, un intendente y personal del DGI, sirvió “para capacitar” a encargados de cauce y “aplicar el ejemplo español” en Mendoza. “Sirvió para conocer en vivo dos modalidades que queremos implementar”, explicó Marinelli.

“Una, es el riego en base a la necesidad según temperatura y agua de reservorios; la otra, en base a la demanda de agricultores”, siguió. Ambas formas, implican “un verdadero cambio cultural” al riego “por turnos” actual, consideró Marinelli.

Otro de los puntos a los que hizo mención fue que Mendoza ha tomado a España como modelo en su defensa por el Atuel, específicamente, en materia de regímenes de caudales ecológicos (tema en discusión con La Pampa), el país europeo ha desarrollado e implementado diversas metodologías, las que han sido volcadas en los planes hidrológicos de cuenca.

Un punto cuestionado fue el gasto. Oficialmente se dijo que el viaje costó $1.634.570, monto “aprobado en el presupuesto” y “con el visto bueno del Honorable Tribunal Administrativo”, dijo Marinelli, que mostró consenso indicando que en ese órgano decisor, “hay dos consejeros peronistas”.

Además aclaró que los fondos del DGI son “íntegros” de lo que aportan los regantes con derecho a riego y que a ellos “les interesa la capacitación”.

El viaje comenzó el 1° de mayo y duró 11 días. Acompañaron a Marinelli 11 (de un total de 18) inspectores de cuenca y subdelegados.

También fueron “la coordinadora de Gabinete del DGI y otros 2 ingenieros”, se informó, y el intendente de Guaymallén, Marcelino Iglesias.

A.C