“Aquella Fiesta del Ternero Mendocino, que los pioneros imaginaron para darle una identidad a Alvear en el contexto provincial y poner en relieve la importancia de la actividad ganadera, parecía algo imposible. Sin embargo, con empeño y esfuerzo, lograron concretar el sueño.

Treinta y cinco años después, lo que comenzó como una iniciativa de unos pocos, tiene vida propia. La llamamos hoy Fiesta Nacional de la Ganadería de Zonas Áridas, y concentra, durante una semana cada año, la atención de toda Mendoza y de gran parte de la región. Diversas actividades productivas, propuestas culturales, recreativas y gastronómicas hacen de este evento algo único en el oeste argentino.

No hay dudas de que la Fiesta se ha convertido en un acontecimiento político y económico de relevancia. Pero para los alvearenses tiene un significado mucho más profundo. A lo largo de nuestra historia hay sobradas pruebas del sacrificio y la tenacidad que nos caracterizan a los habitantes de estas tierras. La Fiesta no es una excepción: durante todo el año se trabaja muy duro para que los primeros días de mayo miles de personas disfruten de un evento de calidad.

La Fiesta de la Ganadería es como nuestra declaración de independencia. Es el suceso más importante para General Alvear desde la creación del Departamento en 1914, a partir de lo que fuera la Colonia Alvear, perteneciente a San Rafael. Es así porque, año tras año, nos une e identifica como ningún otro acontecimiento.

Lo que estamos viviendo en estos días nos hace sentir orgullosos de ser alvearenses. Todos y cada uno de nosotros se involucra, sin importar quiénes somos ni qué pensamos, para salir airosos del desafío de demostrar que somos capaces de dar más.

Tengo el privilegio y el orgullo de haber vivido intensamente la Fiesta como asistente siendo muy joven, como organizador durante más de una década, y hoy con las responsabilidades que el pueblo me ha asignado en la legislatura provincial. Siempre con el mismo entusiasmo y la convicción de que cuando ya esté jubilado me encontraré contándole a los jóvenes las mil anécdotas que he vivido, para contagiarles la mística y transmitirles la enseñanza que a mí me dejó la Fiesta: que la creatividad, sostenida siempre en el esfuerzo, es la herramienta más poderosa para generar cambios permanentes de la sociedad.

Tienen razón los que dicen que la Fiesta de la Ganadería trascendió a General Alvear. En esta 35ª edición, como siempre, gozaremos de una variada oferta para que grandes y chicos de todo el país disfruten en familia de lo mejor que tiene Mendoza. Ya estoy sintiendo ese orgullo impresionante por mi tierra y su gente que me invade cada vez que Alvear se transforma en el centro de la provincia, para recibir con los brazos abiertos a todos los que quieran participar de su fiesta máxima.

Por eso hoy quiero dedicarle mi homenaje a aquellos que me transmitieron la pasión por esta tradición que entre todos supimos construir: Bebe Di Paolo, Arturo Anaya, Roberto Fernández, Miriam Fuenzalida, Adolfo Nieto, Ricardo Di Rosso, entre otros. Ellos son  los verdaderos hacedores de este presente. Se animaron a luchar por sus sueños e hicieron grande a nuestro Departamento.

Hoy renovamos la lucha y anhelamos trabajar juntos por nuevos desafíos.”