Llegando al final de la temporada, bodegueros de la región hicieron una balance sobre la cosecha de este año. Coincidieron en que las heladas tardías y las lluvias han sido perjudiciales para la producción. Asimismo, dieron distintas opiniones sobre el precio de la uva y el vino en el mercado.

En diálogo con F.M. VIÑAS, Jorge Rubio manifestó: «Ha sido una cosecha difícil desde el punto de vista de que tuvimos mucha agua. Faltan una o dos semanas para finalizar el ingreso de uva Cabernet y Bonarda, y esperamos que la calidad no baje a pesar de las lluvias».

Además de las precipitaciones que disminuyen la graduación, concentración de color y aromas, el dueño de la bodega ubicada en ruta 143, afirmó: «Las heladas de octubre afectaron a toda la provincia y parte de San Juan, aunque esto aumentó el precio a un 300 por ciento y fue bueno para el productor».

Por su parte, Carlos Lalik (‘Cavas del Artesano’) opinó: «Venía bien y el clima nos complicó con algunas variedades que no se pueden esperar hasta el grado óptimo para cosecharlas. Además, esperamos que no siga lloviendo, porque el rocío que queda al día siguiente genera la posibilidad de enfermedades por hongos en viñedos».

En cuanto a los precios del mercado, expresó: «Es una cosa que siempre nos tiene a mal traer por los costos, tanto de insumos como de materia prima y en esta temporada se manejaron algunos precios de uva y vino que van a ser imposible pagarlos. Dentro de uno o dos meses, cuando el vino esté en el mercado, vamos a saber bien los precios».

En este sentido, Leonardo Bistolfi, de la bodega ‘Viñas de Alvear’, se refirió al plan ‘Mendoza Fiduciaria’. «Somos un intermediario entre el ente que representa al gobierno y el productor, pero no tenemos participación comercial en el acuerdo. Cualquier herramienta que saquen sirve para consolidar un precio en el mercado». Y en cuanto al clima, cerró: «Fue un año difícil por problemas climáticas, helada tardía y lluvia que hizo mucho daño».

L.A.